Escultura

La escultura “El Pensador” (Le Penseur) inaugurada en 1903, es una de las esculturas más famosas de Auguste Rodin hecha en bronce. La misión de Rodin era dar en la ciudad moderna monumentos modernos y quería también devolver al arte de la escultura la integridad estilística que había perdido. Rodin era un escultor francés educado en la Escuela de Arte Decorativas de París.

“El Pensador” muestra a un hombre desnudo que tiene los pies, las piernas, los brazos y las manos con volumen exagerado. Podemos observar que el hombre está sentado recargado con el brazo derecho sobre su pierna izquierda, y los nudillos de su mano tocando su barbilla, mostrando una ligera inclinación con el torso hacia adelante. Las líneas en los músculos del hombre hace que la masa muscular de sus brazos, chamorros, espalda y torso resalten. Su mirada se muestra fija hacia abajo al igual que su cabeza. El cuerpo esta sobre una base que parece no estar hecha tan a detalle, o bien es el “banco” o “silla” en donde el hombre se encuentra sentado. Sobre esta base también se encuentran recargados ambos pies.

La postura del hombre es cerrada, encorvada, transmite una persona reservada y reflexiva. “El Pensador” involucra todo su cuerpo en la acción de pensar. La figura de la escultura en conjunto es como un romboide, inclinado hacia un lado si se ve de perfil. Las dimensiones de su cuerpo son proporcionales por lo tanto crea armonía en la obra. La textura de esta escultura es rasposa y rugosa, no es completamente lisa. Este conjunto de estas técnicas hace que haya mas intensidad y fuerza en la escultura. También la factura poco pulida de la estatua crea sombras que transmiten al observador el sufrimiento que vive el pensador. El color de la escultura es bronce verdoso, también hay negros verdosos que aporta a la creación de sombras junto con la textura.

Rodin deseaba una figura heroica al estilo de Miguel Ángel para representar tanto el pensar como la poesía.